EL CUERPO ACORAZADO
EL CUERPO ACORAZADO:
La Coraza Física.- La coraza física comprende el tejido conjuntivo, las arterias, las venas, los huesos, los órganos internos y los músculos. Se construye mediante una retención de la espontaneidad del movimiento. Oculta la historia de nuestras tensiones, la historia de los movimientos espontáneos que hemos retenido. Oculta también la historia de nuestras compensaciones, de nuestras posturas copiadas de las de nuestros padres, de las adoptadas para defendernos, de las tomadas para escondernos. La coraza física es, a la vez, muscular y afectiva.
La inhibición puede crearse por una acción inhibidora procedente del exterior (p.ejem, tenemos ganas de correr para manifestar nuestra alegría, y por cualquier razón se nos dice NO, tenemos dos opciones: correr a pesar de todo, o detener el movimiento, pero ¿cuál es el precio que tenemos que pagar por reprimir así nuestra expresión espontánea?.
Teníamos ganas de correr para dar rienda suelta a nuestra emoción, el cerebro dio la orden y los músculos se pusieron en acción; pero nosotros detenemos la acción, la inhibimos, para responder a la petición exterior. Nuestros músculos detienen su movimiento de expresión creando una tensión. Si esto se reproduce durante días, meses, años….la tensión se convierte en una coraza, una armadura, un impedimento para la vida que quería establecerse.
La coraza física puede crearse también por una inhibición interior. Tomando el ejemplo anterior del NO, nos viene de dentro, puede ser una inhibición que nos viene desde dentro. Es posible que hayamos integrado ese NO a lo largo de nuestra vida como un reflejo “condicionado”, así pues cada vez que revivimos la misma situación ese NO interior nos retiene